martes, 7 de abril de 2009

Rezo



... Tú ven, ven, oye conmigo,
oye la silenciosa
reproducción del polen, el embrión
audaz de la semilla, su germinación,
la flor crecida entre la aventura hermosa,
abriéndose hacia el fruto...

Música callada (El vuelo de la celebración, Claudio Rodríguez)

Se puede no respirar. Se puede no ver. Ocurre que hoy quiero respirar y ver con hondura. Por un momento retomo este camino tan lleno de horizonte, tan lleno de color. Es una invitación a retenerse, a asomarse o a asombrarse. ¿Nos asombramos si algo es diminuto? Ese conjunto de flores moradas levantan apenas cinco centímetros. Se respira morado estos días. Yo me alejo de ellos y respiro estas flores, en las que creo, en las que realmente me mido y me integro. Pinto en mi mente el secreto del suelo, su rezo visible.




Al respirar (Vetusta Morla)

Te he dejado en el sillón
las pinturas y una historia en blanco.
No hay principio ni final,
sólo lo que quieras ir contando.

Y al respirar intenta ser quien ponga el aire,
que al inhalar te traiga el mundo de esta parte.

Te he dejado en el sillón
las pinturas y una historia en blanco.
Yo me marcho a otro lugar,
puede que el viaje sea largo.

La burbuja en que crecí nos vendió comodidad
y un nudo entre las manos.
Yo escogí la ambigüedad, tú el fantasma y lo real,
todo en el mismo barco.

Y al respirar propongo ser quien ponga el aire,
que al inhalar me traiga el mundo de esta parte.
Y respirar tan fuerte que se rompa el aire,
aunque esta vez si no respiro es por no ahogarme.

Intenta no respirar ...
Intenta no respirar ...

Y al respirar propongo ser quien ponga el aire,
que al inhalar me traiga el mundo de esta parte.
Y respirar tan fuerte que se rompa el aire,
aunque esta vez quizá será mejor marcharse.

Intenta no respirar ...
Intenta no respirar ...