lunes, 23 de febrero de 2009

Antonio Machado



Fotografiar con nitidez a las avutardas euroasiáticas es difícil. Salvo con un buen teleobjetivo, no se consigue. Y por una razón bien sencilla para quienes conozcan estas aves esteparias: son extremadamente asustadizas y basta con que divisen a alguien a quinientos metros, más o menos, para huir en un bello, perezoso y lento vuelo. Hoy os traigo estas avutardas por Antonio Machado. Se conmemora el setenta aniversario de su muerte y suyo es un poema del año 36 en el que identifica el vuelo torpe de la avutarda con el de los aviones trimotores de la guerra. Poema lleno de dolor por lo que se avecina no dejando por ello revelar su amor e inquietud por la naturaleza fiel. Venga este soneto como recuerdo:

Soneto escrito en una noche de bombardeo en Rocafort (Valencia)

La primavera

Mas fuerte que la guerra -espanto y grima-
cuando con torpe vuelo de avutarda
el ominoso trimotor se encima,
y sobre el vano techo se retarda,
hoy tu alegre zalema el campo anima,
tu claro verde el chopo en yemas guarda.
Fundida irá la nieve de la cima
al hielo rojo de la tierra parda.
Mientras retumba el monte, el mar humea,
da la sirena el lúgubre alarido,
y en el azul el avión platea,
¡cuán agudo se filtra hasta mi oído,
niña inmortal, infatigable dea,
el agrio son de tu rabel florido!