Me da la impresión de que se trata de una foto con un significado muy particular. Con dedicatoria como en el post anterior. Y ese jalón cumplido que señala y el tiempo compartido, o, la memoria forman parte de un tributo, estoy seguro, más que merecido.
Se van cumpliendo etapas sin quererlo. Lo dice claramente el marmolillo. Por más que caminemos junto al río, él busca su camino, y, a veces, sus meandros nos separan y otras veces nos unen nuevamente en un feliz reencuentro. No se sabe.
Preciosos versos de Julia Uceda, poeta sevillana intimista y comprometida, en un tiempo, los cincuenta, en que la mujer, casi por decreto, no podía serlo. Tengo por ahí una antología de poesía femenina que se abre solo por la página de ella.
Como siempre la música y el quejío de M. M. refrendándolo.
Este post me encantó! Tiene una fuerza inusitada. No se porque lo conecté con uno de kavafis que se titulaba "Que el dios abandona a Marco Antonio". No hablan exactamente de los mismo, però algo de uno resuena en el otro. Quizá sea el abandono para siempre una momento de la vida ya pasado. http://wigb.wordpress.com/2008/07/12/que-el-dios-abandonaba-a-antonio-k-kavafis/
_y morirme de repente el dia menos pensado_ Quién pudiera... Mayte Martín canta hondo.
El pasado dia 2 de octubre, respondiendo a Araceli, preguntabas: _Pero este cuaderno, ¿en qué se ha convertido ya?_ Pues sí: Fotos musicadas. Poemas fotografiados. ...
Comunicación. Consolament.
(Consolament es una palabra catalana de imposible traducción. No es, exactamente, ni consuelo ni consolación. Para los cátaros, es la ayuda dada a otr@ para la liberación de su alma)
No hace mucho he girado alrededor de un post perteneciente a un blog amigo, -mas bien de un entrañable amigo- allí ya he dejado mi opinion sobre las despedidas. Leyendo sus palabras no es necesario convencerse de que las despedidas no existen.
¿Parece una fecha apropiada el 67 para quedarse de piedra? No. Simplemente es una sugerencia la propia foto. Efectivamente orientada a la muerte. En este caso los marmolillos se amontonan frente a las nuevas hileras de puntos kilométricos metálicos. Adiós canteros. Pero tras esos marmolillos hay vida. Crecen higueras. La foto es de la época invernal. Está realizada junto a una ribera de un río llamado Sotuélamos. Los versos de Uceda me parecen impresionantes aglutinantes y concretos del tiempo pasado.
Bueno, nada especial en esta foto: todos amontonamos kilómetros sin saber qué hacer con ellos y además para acabar siempre en el mismo sitio, más o menos. Ahora bien, verlos así, en sólido, coño, da que pensar.
Ya veo que Kavafis tiene en ti poso sólido. Aquí, en esta foto bien se podría haber dicho que llegaron los bárbaros. Bárbaros o no, sueño o melancolía por un tiempo que no merecía reventarse tanto como lo hemos hecho, sí. Valentía, también.
De distancias llevadas a cabo, de resentimientos infieles, de hereditarias esperanzas mezcladas con sombra, de asistencias desgarradoramente dulces y días de transparente veta y estatua floral, qué subsiste en mi término escaso, en mi débil producto? De mi lecho amarillo y de mi substancia estrellada, quién no es vecino y ausente a la vez?
Esto es de Neruda, pero lo llevó como cita Cortázar a sus ochenta mundos dados en un día a través de una vuelta.
Descubriste mi blog, pero realmente quien ha descubierto algo soy yo. Me ha encantado. La fotografía me recuerda mucho a una que hizo un amigo en la que aparece un cementerio de anclas oxidadas. En el fondo se encuentra el mismo final: la despedida. Los versos no los conocía. Son fantásticos y conectan fantásticamente con la imagen. Los copio y los imprimo. Un saludo
13 comentarios:
Me da la impresión de que se trata de una foto con un significado muy particular. Con dedicatoria como en el post anterior. Y ese jalón cumplido que señala y el tiempo compartido, o, la memoria forman parte de un tributo, estoy seguro, más que merecido.
Se van cumpliendo etapas sin quererlo. Lo dice claramente el marmolillo. Por más que caminemos junto al río, él busca su camino, y, a veces, sus meandros nos separan y otras veces nos unen nuevamente en un feliz reencuentro. No se sabe.
Preciosos versos de Julia Uceda, poeta sevillana intimista y comprometida, en un tiempo, los cincuenta, en que la mujer, casi por decreto, no podía serlo. Tengo por ahí una antología de poesía femenina que se abre solo por la página de ella.
Como siempre la música y el quejío de M. M. refrendándolo.
Un beso, Sofía.
Este post me encantó! Tiene una fuerza inusitada. No se porque lo conecté con uno de kavafis que se titulaba "Que el dios abandona a Marco Antonio". No hablan exactamente de los mismo, però algo de uno resuena en el otro. Quizá sea el abandono para siempre una momento de la vida ya pasado.
http://wigb.wordpress.com/2008/07/12/que-el-dios-abandonaba-a-antonio-k-kavafis/
A montones.
Medidas para distancias.
Inútiles.
¿A qué le llaman distancia?*
_y morirme de repente
el dia menos pensado_
Quién pudiera...
Mayte Martín canta hondo.
El pasado dia 2 de octubre,
respondiendo a Araceli,
preguntabas:
_Pero este cuaderno, ¿en qué se ha convertido ya?_
Pues sí:
Fotos musicadas.
Poemas fotografiados.
...
Comunicación.
Consolament.
(Consolament es una palabra catalana de imposible traducción.
No es, exactamente, ni consuelo ni consolación.
Para los cátaros, es la ayuda dada a otr@ para la liberación de su alma)
Gracias por todo esto.
Un ancho abrazo.
...
*Atahualpa Yupanqui.
No hace mucho he girado alrededor de un post perteneciente a un blog amigo, -mas bien de un entrañable amigo- allí ya he dejado mi opinion sobre las despedidas. Leyendo sus palabras no es necesario convencerse de que las despedidas no existen.
Biquiños, batis muchos :)
me recuerda a los Autonautas de la cosmopista de J. Cortázar y Carol Dunlop.
Manolotel:
¿Parece una fecha apropiada el 67 para quedarse de piedra? No. Simplemente es una sugerencia la propia foto. Efectivamente orientada a la muerte. En este caso los marmolillos se amontonan frente a las nuevas hileras de puntos kilométricos metálicos. Adiós canteros. Pero tras esos marmolillos hay vida. Crecen higueras. La foto es de la época invernal. Está realizada junto a una ribera de un río llamado Sotuélamos.
Los versos de Uceda me parecen impresionantes aglutinantes y concretos del tiempo pasado.
Besos.
Bueno, nada especial en esta foto: todos amontonamos kilómetros sin saber qué hacer con ellos y además para acabar siempre en el mismo sitio, más o menos. Ahora bien, verlos así, en sólido, coño, da que pensar.
Araceli:
Ya veo que Kavafis tiene en ti poso sólido. Aquí, en esta foto bien se podría haber dicho que llegaron los bárbaros. Bárbaros o no, sueño o melancolía por un tiempo que no merecía reventarse tanto como lo hemos hecho, sí. Valentía, también.
Josep Mª:
'Las leguas desaparecen si el alma empieza a aletear'. (Atahualpa Yupanqui).
Consolament.
Reciprocidad.
Gracias, Josep Mª.
Merce:
Sí existen las despedidas (pero con magma).
Besos.
Macachines:
¿Te digo a ti algo de Cortázar como argentino?
De distancias llevadas a cabo, de resentimientos infieles,
de hereditarias esperanzas mezcladas con sombra, de asistencias desgarradoramente dulces y días de transparente
veta y estatua floral,
qué subsiste en mi término escaso, en mi débil producto?
De mi lecho amarillo y de mi substancia estrellada,
quién no es vecino y ausente a la vez?
Esto es de Neruda, pero lo llevó como cita Cortázar a sus ochenta mundos dados en un día a través de una vuelta.
XuanRata:
Da que pensar y da para pensar. No por ser más kilométrico se tiene la mente más larga. Hay quien se la juega en las distancias cortas.
Besos.
Descubriste mi blog, pero realmente quien ha descubierto algo soy yo. Me ha encantado.
La fotografía me recuerda mucho a una que hizo un amigo en la que aparece un cementerio de anclas oxidadas. En el fondo se encuentra el mismo final: la despedida.
Los versos no los conocía. Son fantásticos y conectan fantásticamente con la imagen. Los copio y los imprimo.
Un saludo
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