martes, 30 de noviembre de 2010

Calado: dos jaicús diferentes

Ya lo dice Arnaldo Antunes en su canción: las cosas no tienen paz. Y ahí lo tienen, la nieve recién caída. Y nos creemos que la nieve va a quedarse así de dichosa y de blanca; y así de inmaculada. De eso nada (monada, dirá alguién). La nieve es lo que menos paz tiene. Y eso se nota por las huellas de los animales que no miran por donde pisan. Pero lo que no saben ellos es la capacidad delatora de la nieve. Y la carencia de paz también se notaría si sobre ella dos amantes se revolcasen, fundición creo que se llama, ¿no? Pues al grano, que la nieve no tiene paz y que, al menos siempre tiene un doble calado. Os dejo ese jaicú, como dice un amigo mío, que él escribe de oído y que aunque los japoneses digan haikú, él a lo Juan Ramón Jiménez: reivindicación del sonido (¡y qué razón tenía!, ¿lo cojen?).



Ha amanecido...
la nieve habla por ellos
amantes, huellas...



Ha amanecido...
la nieve habla por ellos
amantes, huellas...



As Coisas
Arnaldo Antunes
Composição: Arnaldo Antunes e Gilberto Gil

As coisas têm peso, massa, volume, tamanho, tempo, forma, cor, posição, textura, du-ração, densidade, cheiro, valor, consistência, pro-fundi-dade, contorno, temperatura, função, aparência, preço, des-tino, idade, sentido. As coisas não têm paz.