miércoles, 18 de noviembre de 2009

Previsiones



Indican ante este mar las previsiones lluvia ladeada.
No nos sorprendemos, pues. Mi previsión sería,
la de ser deudora de la mínima parte de la costa
y pertenecer al día que llega, haciendo de todo
acopio, rumor ante todo, lluvia sin duda, pero,
como ya dije, sin nada fijado, tan sólo
fraguarme en el mar, como arquitectura imprevista.



ÁLEX SUSANNA

Naufragi

Plou, amor, sempre que véns,
i trona i llampega premonitòriament
com per avisar-me que rere teu
s’hi amaga una delicada tempesta
que pot fer estralls dins meu…
Arribes espurnejant de pluja
i caiem de nou l’un dins l’altre,
fins a convertir-nos per uns moments
en una sola onada de pell
que envesteix furiosa
la costa del desig…
Renaixem després nous i pletòrics,
i fixem llavors els nostres ulls
en els perills del cos de l’altre,
com per reconèixer els diferents esculls
amb què hem anat topant
al llarg del nostre periple…

El viatge de l’amor
vol tanta embranzida com càlcul:
si no, el plaer es deixata en oblit
i res no pot sorprendre’ns
perquè res no ha estat previst


Naufragio

Llueve, amor, siempre que vienes,
truena y relampaguea premonitoriamente
como para avisar que detrás de ti
se oculta una tormenta delicada
que puede hacerme estragos...
Llegas deslumbrante de lluvia
y de nuevo caemos el uno en el otro,
y únicamente somos los dos por un momento
ola de piel que rompe enfurecida
sobre la costa del deseo.

Renacemos después pletóricos y nuevos,
y fijamos entonces nuestros ojos
en el cuerpo del otro y sus peligros
como por comprobar los diferentes
escollos que nos fuimos encontrando
en nuestra singladura.

El viaje del amor
precisa tanto impulso como cálculo:
si no el placer se deshace en olvido
y nada puede sorprendernos
porque nada fue previsto.

Traducción: Luis García Montero y Jon Juaristi






O mundo era praia
e ti na varanda
sorrías ao pasar
igual que nun soño

Bañamos nas ondas
o noso desexo
varado frente ao mar
coa sede infinita do sal

Ven e saberás do meu querer
Ven e lavarei as mágoas na maré
Ven e lamberás o mel
Ven sobre a maré
Ven de vagar

As horas esvaran
na néboa da alba
e a auga baixa a man
da túa presencia

Aínda seremos
veleiros sen rumo
amantes sen aneis
golfiños que asoman do mar

Os faros sinalan
os lindes da alma
fiando sen parar
nas redes do infindo

Resoan os sinos
no espello dos ollos
na liña da maré
semella que estás a agardar

6 comentarios:

ybris dijo...

Arquitectura imprevista fraguada en el mar.
Preciso.
A veces somos deudores de la costa.
Precioso.

Besos.

XuanRata dijo...

Qué sutil composición la de esta imagen: nube, arco, escollo y ola conforman una haz de líneas que confluyen, flecha que indica la dirección obligatoria que viene a nuestro encuentro, el sentido de todos los sentidos.

JosepMª dijo...

Es muy bella la fotografía.
El arcoiris
sobre el mar.

Acompaña el poema.
Y la canción, engancha.

Shandy dijo...

Buena y bella aquitectura imprevista la de tu imagen.
Pedro Glup hacía ayer referencia a un "Mago de la tierra", un artista africano (no recuerdo su nombre). Decía el artista, que dibujar no es exclusivo del homo sapiens, sino que también lo hace la naturaleza, y sólo hay que aprender y comprender. Y diría yo que también aprehender. En este caso con el objetivo de una cámara.
(Por cierto que la naturaleza es caprichosa porque esas islas sobr el mar tienen forma de cocodrilo y tortuga. O al menos a mí me lo parecen)
Los textos, también bellos. Emocionalmente, más tormentoso el primero y más calmado el segundo con ese "vén de vagar" y ritmo de cantiga. Así que combino y me quedo con el primer y último versos: Plou, amor, sempre que véns. Na liña do már estás a agardar.

Merce dijo...

como siempre yo me diluyo en el mar, y esta vez me llevo conmigo las palabras y los sonidos, es un ir y venir placentero, vagar ondeando de ola en ola. Nada, que cuando me parezca que fuera no hay marejada, resurjo :)
Biquiños

Noesperesnada dijo...

Muy interesante leerte. El mar tiene esa atracción que nos invita a confundirnos en él. Tal vez en algun lugar lejano de nuestra memoria genetica haya algo que nos recuerde que de allí venimos...